El culto a la belleza en ocasiones ha perjudicado la salud, y los dientes de nuestras antepasadas son una prueba de ello. Desde finales del s XV, muchas mujeres preferían soportar las caries y otras infecciones de muelas antes que lucir un hueco en sus sonrisas. Ahora investigadores del área de Antropología Física de la Universidad de Oviedo han incorporado la perspectiva genética a sus estudios con un rastreo de los orígenes de la población asturiana mediante análisis de ADN.
Tuberías entre las montañas. Así serían las venas de la vertiente cantábrica de no ser por la fauna que los vive y que está ligada a la salud general del ecosistema. Y dos de los pobladores clásicos de estos ríos, el salmón y la trucha, han disminuido drásticamente durante las últimas décadas, una tendencia que ha tratado de combatirse con repoblaciones. Para evaluar la eficacia de esta estrategia y determinar cuáles son las mejores herramientas de protección de ambas especies, el Grupo de Genética de Recursos Naturales de la Universidad de Oviedo acaba de finalizar un proyecto de investigación.
En la imagen, Eva García Vázquez en uno de los laboratorios del Departamento de Biología Funcional de la Universidad de Oviedo. Foto: FICYT.