El pasado 21 de octubre se anunció que Teresa Romero había superado la infección por ébola que había contraído al asistir al médico cooperante Manuel García Viejo, fallecido un mes antes por la enfermedad. ¿De qué depende que un paciente sobreviva o sucumba al virus? Según un estudio llevado a cabo en ratones, el papel de los genes es determinante. Los resultados podrían acelerar el desarrollo de medicamentos y vacunas.
La Organización Mundial de la Salud ha comunicado hoy su agrado por la aprobación, por parte de la Agencia Suiza de Productos Terapéuticos –Swissmedic–, del ensayo de la vacuna del ébola en el Hospital Universitario de Lausanne. Los ensayos comenzarán esta semana y se esperan los primeros resultados para el mes de diciembre.
Un artículo de opinión publicado el pasado septiembre en la revista The Lancet afirma que las medidas de protección infecciosa respiratoria que se utilizan ante los pacientes de ébola “son frecuentemente innecesarias y pueden contribuir al pánico de la población”, sobre todo, en países que no se pueden permitir adquirir esos elementos de protección. Los autores explican que el virus tiene escasa capacidad para propagarse por vía aérea.
Tras la confirmación ayer del positivo por ébola en el test inicial de una trabajadora sanitaria del Hospital Presbiteriano de Texas (Dallas, EEUU), hoy se ha hecho público el mismo resultado en el segundo examen. La enfermera atendió a Thomas Eric Duncan, el liberiano infectado de ébola que murió el pasado miércoles en el hospital tejano.
El Ministerio de Sanidad reconoce errores e impulsará que los profesionales sanitarios en contacto directo con pacientes infectados sean considerados personal de riesgo y se les haga un seguimiento más activo.
Infografía sobre las principales vías de propagación del ébola. / Saluspot