Un grupo antiguo del SARS-CoV-2 dominó en el confinamiento español de la primera oleada, ¿tuvo mayor virulencia? No. Se ha dicho que Aragón y Cataluña fueron foco de una nueva cepa por toda Europa durante el verano, ¿está ya probado? Tampoco. Las autoras de los últimos estudios genéticos validados sobre la pandemia en nuestro país y la directora del Instituto de Salud Carlos III aclaran dudas.
Esta cardióloga dirige el gran organismo público de investigación que realiza, entre otros, el estudio de seroprevalencia del SARS-CoV-2 en España. Considera que, cuando las hipótesis científicas se trasladan a la población, corren el riesgo de convertirse en “simplificaciones erróneas y peligrosas”. Además, asegura que las mutaciones del coronavirus han jugado un papel menor si se comparan con los factores sociales y sanitarios.
Prevenir pandemias a través de la lucha contra la crisis climática y la pérdida de biodiversidad es cien veces más barato que enfrentar brotes como el de covid-19, advierten desde la ONU tras la publicación del último informe de la Plataforma Intergubernamental de Ciencia y Política sobre Biodiversidad y Servicios de los Ecosistemas.
Un análisis de la diversidad genómica del SARS-CoV-2 ha identificado más de 500 entradas en el país a comienzo de la pandemia, pero solo unos pocos linajes llegaron a propagarse masivamente gracias a eventos de superdispersión, como partidos de fútbol y funerales. Uno de los genotipos generó el 30 % de todos los casos, llegando a representar un 60 % en la primera semana de marzo.
Resultados preliminares indican que esta candidata a vacuna, desarrollada por la universidad británica y AstraZeneca, produce anticuerpos protectores y células T en las personas de más edad. Estos datos aún no han sido publicados en ninguna revista científica.
La colaboración es clave para desarrollar un cóctel de anticuerpos eficaz contra el coronavirus y que sea asequible. Julien Potet, analista de Políticas, Vacunas y Enfermedades Olvidadas de la Campaña de Acceso de Médicos Sin Fronteras, analiza la situación de las grandes compañías farmacéuticas en su investigación y cómo garantizar un acceso equitativo.
Actividades en exteriores siempre que se pueda, ventilar abriendo las ventanas aunque los alumnos tengan que abrigarse, usar medidores de CO2 para confirmar que el aire se renueva y filtros HEPA solo en casos necesarios. Estos son los consejos para minimizar la expansión de la covid-19 en los centros educativos, también válidos para ámbitos profesionales en los que sea imposible teletrabajar.
Investigadores españoles han participado en la creación de una nueva herramienta biológica que permite generar variantes genéticas del coronavirus para estudiarlo, analizar fármacos antivirales y poder desarrollar candidatos vacunales.
Investigadores del CNIO han descubierto cómo el coxsackievirus tipo 4B afecta a las funciones y la identidad de las células beta que generan insulina en el páncreas, causando la aparición de diabetes. El hallazgo podría ser de relevancia en la pandemia de covid-19, ya que trabajos recientes indican que el SARS-CoV-2 también podría causar esta enfermedad en algunos pacientes.
Según los resultados de una encuesta, las investigadoras tuvieron que asumir más tareas del hogar y cuidados de personas dependientes que sus compañeros investigadores, lo que afectó negativamente a su producción científica.