Suscríbete al boletín semanal

Recibe cada semana los contenidos más relevantes de la actualidad científica.

Agencia Sinc

¿El VIH en la leche materna es intrasmisible?

Un reciente estudio ha caracterizado en profundidad este virus en la leche de dos mujeres con carga viral indetectable. Los hallazgos pueden ayudar a evaluar los riesgos y beneficios de esta práctica en diferentes contextos.

¿El VIH en la leche materna es intrasmisible?
En la imagen de archivo, una madre da el pecho a su hija. / EFE/ Raúl Caro

Desde hace tiempo se conoce que el riesgo de transmisión del VIH por la lactancia es mínimo en mujeres con carga viral indetectable en sangre. Ahora un estudio ha caracterizado en profundidad este virus asociado a las células en la leche, lo que supone una base sólida para entender cómo se comporta en ese contexto.

La investigación, publicada en el Annals of Internal Medicine, está encabezada por Natalia Laufer, de la Universidad de Buenos Aires (Argentina) y analiza la presencia del VIH en leche materna de mujeres con niveles indetectables del virus en sangre.

Desde hace tiempo se conoce que el riesgo de transmisión del VIH por la lactancia es mínimo en mujeres con carga viral indetectable en sangre

Dada la enorme cantidad de células presentes en este alimento que los bebés reciben durante la lactancia, “es fundamental conocer sus características y potencial. Al ofrecer esta información, ayudamos a informar y ajustar las guías de lactancia para mujeres que viven con VIH”, afirma Laufer.

El trabajo contó con una pequeña muestra: dos mujeres seropositivas, de las que una es la paciente Esperanza (una controladora de élite que mantiene cargas virales reducidas sin antirretrovirales), otra bajo tratamiento durante años y una más de control.

Riesgo extremadamente bajo

Los investigadores evaluaron el virus libre y el ADN del VIH asociado a las células en la leche materna durante las primeras siete semanas de lactancia en la paciente Esperanza, que lleva nueve años de control viral espontáneo, y la mujer bajo tratamiento con cargas virales indetectables durante más de 5 años.

Laufer explica que, aunque se detectó VIH ADN en niveles muy bajos, no se encontró VIH ARN que pudiera causar infección, lo que indica “que el riesgo de transmisión es extremadamente bajo”.

Aunque se detectó VIH ADN en niveles muy bajos, no se encontró VIH ARN que pudiera causar infección, lo que indica que el riesgo de transmisión es extremadamente bajo

Sin embargo, en el contexto de la lactancia -destaca- es crucial entender que el virus asociado a células que forman parte de la leche podría convertirse en una fuente potencial de infección si se reactiva.

El VIH ARN se refiere al material genético del virus que está presente en el organismo y puede contribuir a la infección, mientras que el VIH ADN se trata de la copia del virus que puede estar presente en las células, pero no necesariamente está activa, afirmó la científica.

Necesarios más estudios

Ahora hacen falta estudios más amplios para confirmar estos resultados y entender mejor el comportamiento del VIH en diferentes contextos, indica Laufer, pero considera que este es “un primer paso significativo”.

En cuanto a la participación de la paciente Esperanza, apunta que su caso “no es homologable a lo que sucede en otras personas”, pero sí que ofrece pistas valiosas sobre lo que ocurre en la leche materna en el contexto de un control viral extremo.

Laufer destaca la necesidad de seguir investigando sobre la lactancia y el VIH para abordar las preocupaciones y deseos de las mujeres que viven con VIH que desean amamantar

La investigadora señaló que a medida que las pautas de lactancia para mujeres con VIH continúan evolucionando, estos hallazgos pueden ayudar a informar de estas decisiones y proporcionar un marco para evaluar los riesgos y beneficios de la lactancia en diferentes contextos.

Laufer destaca la necesidad de seguir investigando sobre la lactancia y el VIH para abordar las preocupaciones y deseos de las mujeres que viven con VIH que desean amamantar. “Esto solo es el comienzo y necesitamos más evidencia para ayudar a las mujeres a tomar decisiones informadas sobre su salud y la de sus bebés”, concluye.

Fuente:
SINC
Derechos: Creative Commons.
Artículos relacionados