Las aves migratorias se mantienen hidratadas quemando las proteínas de sus músculos durante el vuelo, según un estudio publicado en Science. De esta manera, conservan su nivel de agua sin realizar frecuentes paradas en sus largos viajes.
Incluso cuando disponen de reservas de grasas, los pájaros migratorios metabolizan proteínas para obtener energía, con lo que reducen el tamaño de determinados músculos. Durante años, los investigadores han especulado con las posibles causas de este comportamiento.
Una de las explicaciones más populares sugería que al quemar músculos, lograban reducir su tamaño, con lo que disminuía el gasto energético necesario para volar; pero hasta ahora no se había llegado a ninguna conclusión definitiva. La pista decisiva es que, aunque con esta estrategia los animales obtienen menos energía, producen cinco veces más cantidad de agua. Por tanto, la hidratación podría ser el objetivo.
En el experimento, Alexander R. Gerson y Christopher G. Guglielmo, investigadores de la Universidad de Ontario del Oeste (Canadá) estudiaron el vuelo de zorzalitos de Swainson (Catharus ustulatus). Compararon el comportamiento del animal en un túnel de viento bajo diversas condiciones atmosféricas, y concluyeron que el nivel de humedad puede determinar cómo las aves metabolizan y almacenan proteínas.