Lápiz en mano, hoja de papel, huesos, conocimientos científicos, y un toque de imaginación. Estos son los ingredientes que dan una vida virtual a los dinosaurios. Las reconstrucciones y restauraciones completan el esqueleto en tamaño real. Hoy las nuevas técnicas como el modelado en 3D, y los nuevos materiales hacen más reales estas resurrecciones, en las que intervienen ilustradores, restauradores y paleontólogos.En la imagen, Daniel Ayala, restaurador de Teruel-Dinópolis, muestra una reproducción de un fósil gigante.