El uso del vídeo como herramienta educativa favorece un aprendizaje reflexivo y progresivo entre el alumnado, a la vez que despierta su creatividad y curiosidad. Así lo recoge un estudio europeo con más de 2.000 estudiantes de Primaria, Secundaria, Bachillerato y universidad liderado desde la Universidad Rey Juan Carlos, en Madrid.
Pedagogos de la Universidad Pompeu Fabra han demostrado los beneficios de combinar la enseñanza basada en problemas con la tradicional en las carreras científicas. Los alumnos con un plan de estudios híbrido han mejorado en 1,4 puntos su aprendizaje a largo plazo.
Vidrio fabricado con excrementos de ciervo, botellas vacías para no ahogarse en la piscina, plantillas de cáscara de naranja, escarabajos comedores de plástico y dispositivos que premian la entrega de colillas. Estas ideas no han salido de sesudos científicos, sino de los chavales que este mes han participado en Tenerife en la FIRST LEGO League, un encuentro donde niños y jóvenes de 40 países han demostrado su capacidad para dirigir robots de LEGO y proyectos científicos.
El 46,31% de los profesores de la Comunidad de Madrid que participaron en un estudio sobre sus habilidades digitales presentaron un perfil negativo en estas competencias. Es la principal conclusión de una investigación dirigida por la Universidad Complutense de Madrid en la que participaron más de 1.400 docentes. La edad y la falta de formación digital explican este bajo nivel tecnológico, algo que repercute negativamente en los alumnos.
Mybullying genera un mapa social de la clase donde se representan los casos de acoso escolar o aquellos que podrían llegar a serlo. / UCM
A mediados de este mes empezará a aplicarse en 700 colegios de la Comunidad de Madrid el programa Mybullying, una herramienta online desarrollada por la Universidad Complutense de Madrid que detecta el acoso escolar en solo diez minutos. El programa, que se ha probado en miles de estudiantes desde 2005, genera un mapa social de la clase y propone medidas para evitar el aislamiento de los estudiantes más vulnerables.
A las construcciones, puzles, coches, peluches y muñecas se une desde hace unos años una nueva categoría de juegos que dicen fomentar el interés por las ciencias en niños y niñas. Sin embargo, aunque los juguetes STEM (Ciencias, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas, en sus siglas en inglés) están cada vez más solicitados, no hay evidencia científica que muestre que realmente estos impulsen más el interés por la ciencia que los juguetes clásicos y sencillos.
“La mayoría de la gente no llega a darse cuenta de lo brillante que es. No encuentran a profesores que realmente creen en ellos y se convencen de que son estúpidos”. Este fue el monólogo del matemático y escritor canadiense John Mighton (Hamilton, 1957) en la película El Indomable Will Hunting en la que interpretó al asistente del profesor Lambeau. Siguiendo esta filosofía, Mighton fundó en 2001 la organización JUMP Math, con un programa que devuelve la confianza al alumno, reduce la ansiedad y refuerza su potencial en una de las asignaturas con las que él mismo tuvo problemas, las matemáticas.
John Mighton durante el evento Fomentando vocaciones STEM organizado en el MUNCYT el pasado mes de noviembre.
Una investigación que ha analizado el sedentarismo, el ejercicio físico y el rendimiento académico en más de 4.000 adolescentes españoles revela que, al contrario de lo que se tiende a pensar, a los estudiantes con mejores notas les gusta la asignatura de educación física. El trabajo, en el que participa la Universidad Complutense de Madrid, muestra cómo a los chicos les agrada en mayor proporción que a las chicas.