La seguridad nuclear y la protección radiológica es el objetivo único del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN), la credibilidad el “subobjetivo” fundamental y la neutralidad uno de sus objetivos instrumentales. Así lo recoge el nuevo Plan Estratégico del organismo regulador para el periodo 2011-2016, que esta semana se ha presentado a los medios de comunicación.
"Toda la planificación estratégica del CSN gira sobre un único objetivo, contra el que habrán de validarse y alinearse el conjunto de políticas o ejes estratégicos que se definan, así como las decisiones que se tomen y las actividades que se llevan a cabo", ha subrayado Luis Gámir, vicepresidente del CSN, durante la presentación este martes a la prensa del Plan Estratégico de la institución para 2011-2016.
La teoría de los organismos reguladores destaca la importancia de que tengan un objetivo único y fundamental, y el CSN ha establecido la seguridad nuclear y la protección radiológica. Esta decisión permite unificar las gestiones en torno a un referente único, jerarquizar subobjetivos y disminuir el grado de actuaciones no regladas.
Del objetivo único depende el “subobjetivo” de la credibilidad. Para aumentar esta cualidad en la sociedad, los responsables de la institución han introducido técnicas matemáticas como la teoría de juegos. Y para cumplir el objetivo principal y hacerlo creíble se establecen los “objetivos instrumentales” de la independencia, la neutralidad y la transparencia, así como la eficacia y la eficiencia en todas las acciones.
Neutralidad como objetivo
Respecto a la neutralidad, se entiende como la “no adopción de una posición particular, a favor o en contra, con respecto al uso de la tecnología nuclear y las radiaciones ionizantes en cualquiera de sus aplicaciones”. Este objetivo implica para el organismo regulador el mantenerse ajeno a las cuestiones relativas a las decisiones de política energética y a sus consecuencias en el resto de los sectores económicos.
El Plan señala que la misión del CSN es proteger a los trabajadores, a la población y al medio ambiente de los efectos nocivos de las radiaciones ionizantes, “consiguiendo que las instalaciones nucleares y radiactivas sean operadas por los titulares de forma segura, y estableciendo las medidas de prevención y corrección frente a cualquier emergencia radiológica”.
El diseño del nuevo texto, que sustituye al anterior de 2005-2010, se ha realizado conjuntamente por el vicepresidente Gámir, el Pleno del Consejo, las direcciones técnicas de Seguridad Nuclear y de Protección Radiológica, y las unidades organizativas dependientes de la Secretaria General. Los directores técnicos de Seguridad Nuclear y Protección Radiológica del CSN, Isabel Mellado y Juan Carlos Lentijo respectivamente, también han asistido a la presentación.
En cumplimiento de una resolución de la Comisión de Industria, Turismo y Comercio del Congreso de los Diputados al informe anual 2009, que instaba al CSN a enviar al Parlamento el nuevo Plan Estratégico, el organismo regulador ya ha iniciado los trámites para enviarlo a la cámara baja.
En la región del polo sur de la Luna existen zonas donde nunca luce el Sol y otras donde siempre llegan sus rayos. Para que los vehículos puedan operar en esas condiciones, y con fondos de la Agencia Espacial Europea, investigadores de España y Reino Unido desarrollan sistemas que combinan paneles solares, baterías y generadores termoeléctricos de radioisótopos.
La metodología diseñada por la Universidad de Murcia y el CSIC identifica las regiones donde el sol y el viento ofrecen, conjuntamente, menos fluctuaciones en la producción de energía. A través de la sistema Climax se pueden planificar el emplazamiento y uso compartido de estas renovables para aumentar la estabilidad del suministro.
