La Agencia Europea del Medicamento recalca que el riesgo de sufrir trombosis con plaquetas bajas es muy bajo en la población que reciba esta protección. No obstante, piden “especial atención a los síntomas” durante las tres semanas siguientes a la administración.
La vacuna de Janssen/Johnson & Johnson es la última opción aprobada en la Unión Europea para proteger contra la covid-19. Los ensayos clínicos, realizados en parte en España, avalan la eficacia de este suero. Además, es la primera pauta que precisa de una única dosis y se puede almacenar y distribuir a temperatura de nevera (entre 2 y 8 ºC), incluso durante un máximo de 12 horas a temperatura ambiente (hasta 25 ºC).
El comité de farmacovigilancia de la Agencia Europea del Medicamento (EMA), conocido como PRAC, ha encontrado un posible vínculo entre raros casos de trombosis y plaquetas bajas relacionadas con la administración de la vacuna después de identificar ocho casos en Estados Unidos, donde más de siete millones de personas la han recibido.
A pesar de estos casos muy infrecuentes de trombosis con trombocitopenia (plaquetas bajas), el regulador europeo de medicamentos recalca que los beneficios de esta vacuna superan a estos posibles riesgos.
No obstante, solicita a la población que pueda recibir esta vacuna que esté atenta a cualquier complicación durante las tres semanas siguientes de la administración y que busquen asistencia médica inmediata si presentan los siguientes síntomas: dificultad para respirar, dolor en el pecho, hinchazón en la pierna, dolor abdominal o de vientre persistente, síntomas neurológicos (dolor de cabeza intenso y persistente o visión borrosa) y pequeñas manchas de sangre bajo la piel más allá del lugar de la inyección.
La EMA ha indicado a los profesionales que estos raros casos de trombosis con trombocitopenia incluyen trombosis venosas en lugares poco habituales, como de senos venosos cerebrales, de la vena esplácnica y arteriales. Todos los casos investigados se produjeron en menores de 60 años, en las tres semanas siguientes a la vacunación y en una mayoría de mujeres. Solo una de las personas que sufrió estas trombosis con trombocitopenia falleció.
“Los sanitarios deben estar atentos a los signos y síntomas de la tromboembolia y la trombocitopenia para poder tratar rápidamente a las personas afectadas de acuerdo con las directrices disponibles”, han declarado.
Los casos revisados por los expertos de la agencia fueron muy similares a los que se produjeron con la vacuna desarrollada por AstraZeneca, Vaxzevria.
“En cuanto al mecanismo, se cree que la vacuna puede desencadenar una respuesta inmunitaria que conduzca a un trastorno similar a la trombocitopenia inducida por la heparina. En este momento, no se ha establecido el mecanismo fisiopatológico, y actualmente no es posible identificar factores de riesgo específicos”, han concluido.