Un equipo internacional de investigadores, liderado por el Museo Nacional de Ciencias Naturales, ha descubierto un nuevo proceso de formación de especies. Los científicos han estudiado poblaciones de lagartijas de turbera (Zootoca vivipara), una de las pocas especies de vertebrados que tiene dos modos de reproducción: oviparismo y viviparismo.
Entre los vertebrados, existen diferentes modos de reproducción, entre ellos el viviparismo, en el cual el embrión se desarrolla dentro del vientre materno y el oviparismo en el cual el embrión se desarrolla dentro de un huevo, fuera del vientre materno.
La lagartija de turbera (Zootoca vivipara) es una de las seis especies registradas, de los cerca de 40.000 vertebrados que se conocen, en las que encontramos ambos modos de reproducción dentro de una misma especie. Existen poblaciones ovíparas y poblaciones vivíparas e individuos de ambos modos que se reproducen entre ellos.
Lo que han descubierto los investigadores es que los diferentes modos de reproducción aíslan reproductivamente a las poblaciones vivíparas y ovíparas de lagartija de turbera al entrar en contacto.
Los individuos restringen el apareamiento a individuos del mismo modo de reproducción, generando un aislamiento reproductivo dentro de la especie que a largo plazo provocaría una especiación, es decir la aparición de dos especies diferenciadas.
“Parece por tanto, que las pocas especies que tienen ambos modos reproductores podrían estar en proceso de especiación actualmente”, explica Patrick S. Fitze, investigador del MNCN.
“Lo más increíble de este estudio es que hemos detectado el proceso justo en la ventana temporal en la que se está produciendo la especiación. Parece que las pocas especies que tienen ambos modos reproductores podrían estar separándose ahora, y por tanto la bimodalidad reproductora se mantendría solamente durante un tiempo limitado. Podemos ver cómo ocurre este proceso y los motivos de su aislamiento reproductivo, así como la disminución de la población de híbridos”, continúa J.L. Horreo, también del MNCN.
Otros parámetros ecológicos que pueden afectar al aislamiento reproductivo incluyen la selección sexual, la incompatibilidad genética, una mala condición física de la descendencia o en general un menor éxito reproductivo de los híbridos.
El estudio ha recogido muestras de ADN en diferentes puntos de Europa, para analizar la hibridación genética entre poblaciones que comparten una misma localización geográfica. Los muestreos realizados han recorrido Eurasia pasando por regiones de Francia, España, Italia, Suiza, Austria, Polonia, Ucrania, Hungría, Bielorrusia, Eslovaquia, y Andorra, entre otros.
Referencia bibliográfica:
J. L. Horreo, M. C. Breedveld, D. Lindtke, B. Heulin, Y. Surget-Groba, Fitze P.S. "Genetic introgression among differentiated clades is lower among clades exhibiting different parity modes" (2019). Heredity, doi10.1038/s41437-019-0201-7.