Con el lanzamiento de la misión europea CHEOPS, comienza una nueva era en la exploración de planetas fuera del sistema solar. Cada vez más ambiciosos, los telescopios buscan lo que aún nadie ha hallado: mundos extraterrestres parecidos al nuestro.
El Asfaltovenator vialidadi vivió hace 170 millones de años en la Patagonia argentina. Medía ocho metros de largo y, según los científicos, representa un momento de explosión evolutiva en el que se diversificaron los dinosaurios.
En Colonia (Alemania), doce voluntarios se sacrifican por la ciencia: pasan 60 días recostados en un estudio que simula las condiciones de microgravedad del espacio para contrarrestar la degeneración de huesos y músculos que sufren los astronautas. Su recompensa, además de 16.500 euros, es saber que están haciendo historia de la investigación aeroespacial.
En su libro De matasanos a cirujanos (Debate), esta escritora estadounidense rescata del olvido a un gran héroe moderno: el cirujano británico Joseph Lister (1827-1912), quien, en una época en la que los médicos no se lavaban las manos y las cirugías tenían tasas de mortalidad extremadamente altas, cambió la medicina para siempre al introducir las técnicas antisépticas.
Las máquinas inteligentes ya están entre nosotros y, para bien o para mal, alteran nuestros vínculos sociales. A medida que se infiltran en ámbitos privados de nuestra vida, psicólogos y especialistas en ética advierten cómo nos afectan emocionalmente las relaciones con estos seres artificiales.
Al norte de la Patagonia, un equipo de científicos ha descubierto los restos de una nueva especie de dinosaurio herbívoro que hace 140 millones de años disuadía a los depredadores con largas espinas que crecían de su cuello.
Nuevas prótesis cerebrales inalámbricas prometen liberar de su encierro a personas paralizadas, manejar drones y conectarnos a internet con el pensamiento. Estas neurotecnologías, que suenan a capítulo de Black Mirror, implican desafíos éticos y, posiblemente, una revolución social.
No se sabe si fue macho o hembra, pero los paleóntólogos argentinos que han descubierto a esta nueva especie de dinosaurio hervíboro han decidido ponerle un nombre femenino: Ingentia prima. Esta colosal criatura medía entre entre 8 y 10 metros de longitud, pesaba unas 10 toneladas y vivió hace unos 205 millones de años, por lo que representa el caso más antiguo de gigantismo en dinosaurios.
Susan Sontag, una de las intelectuales más importantes del siglo XX, expuso hace 40 años cómo las maneras en que nos referimos al cáncer, el sida, la sífilis, la lepra y la tuberculosis repercuten en la conciencia colectiva de la sociedad occidental, ya sea al estigmatizar a los pacientes u orientando políticas de salud pública. Con una gran lucidez, su detonador ensayo muestra que las palabras pueden herir e incluso matar.
Ella es ingeniera aeronáutica, celebridad del MIT y fue la subdirectora de la NASA durante la presidencia de Barack Obama. Él es arquitecto especializado en ambientes extremos. Además de navegar alrededor del mundo en su velero, este matrimonio diseña trajes ligeros y ceñidos que protegen a los astronautas de la microgravedad, imagina nuevas bases lunares y sueña con universidades en órbita.