Científicos de la Universidad de Málaga evidencian que los caballos son buenos indicadores para anticipar su aparición en humanos. Se trata de un patógeno emergente en España que se transmite de aves a personas a través de las picaduras de mosquitos.
Un azor encontrado en la población de Alpicat, que había entrado enfermo al centro de recuperación de Fauna de Vallcalent, ha resultado positivo al virus del Nilo Occidental. Las inspecciones entomológicas que se han realizado a los mosquitos de la zona indican que han sido negativos al virus.
Tras el brote de casos de meningoencefalitis provocados por el virus del Nilo Occidental en Andalucía han surgido diversas incógnitas, en particular sobre las especies de mosquitos implicadas. Culexperexiguus y Culex pipiens, autóctonas de España, son los principales vectores de este virus, que reside en muchas aves e infecta a caballos y humanos. El Aedesjaponicus, aunque tiene capacidad de transmitirlo, no está en el sur de España ni parece ser el responsable del brote de esta semana.
La reciente observación del mosquito Aedes japonicus en España, posible transmisor del virus del Nilo occidental y potencialmente del dengue y el chikungunya, amplía la lista de estos insectos en nuestro país. Una forma de controlarlos sería a través de los ácaros acuáticos, predadores de mosquitos e inocuos para el humano. Para ello, los científicos piden elaborar una guía de estos organismos tan biodiversos como desconocidos.
El virus del Nilo Occidental es un patógeno zoonótico que mantiene su ciclo enzoótico principalmente entre aves y mosquitos. Desde 2008, algunas epidemias en el sur y el este de Europa han causado graves enfermedades neurológicas en seres humanos y equinos, e incluso algunos casos mortales. Los datos obtenidos del sistema de vigilancia ecológica de este virus en Cataluña indican que no se detectó el virus en mosquitos ni infecciones en animales, pero sí existió transmisión local entre poblaciones de aves.
Por primera vez, investigadores han descrito una infección experimental con el virus del Nilo occidental (VNO) en halcones híbridos Gyr-Saker y han demostrado que pueden infectarse por este virus. Los resultados obtenidos en este estudio demuestran que, aunque los halcones híbridos no parecen ser buenos reservorios para la transmisión del VNO a través de mosquitos, sí que pueden contraer el virus y desarrollar viremia y anticuerpos frente al virus.
Un equipo internacional de científicos de 37 instituciones, con participación española, ha secuenciado el genoma de Culex quinquefasciatus, el mosquito que trasmite la enfermedad del Nilo Occidental. Junto a la secuenciación de los genomas de otros dos mosquitos (el que trasmite la malaria y la fiebre amarilla y el dengue), el estudio, que se publica en Science esta semana, permitirá encontrar nuevas estrategias para la lucha contra esta enfermedad.