Unos depósitos de roca estudiados en el Cabo Cope, en Murcia, fueron arrastrados por fuertes olas causadas por un maremoto ocurrido hace aproximadamente entre 800 y 1.400 años, según una investigación de la UNED, la Universidad de Alcalá de Henares y la Universidad del Oeste de Inglaterra. Los autores sostienen la necesidad de implementar planes de actuación local en la costa mediterránea.
Alerta de tsunami en Japón por un terremoto de magnitud 7,3. / EFE/EPA/USGS
La erupción de El Abrigo, que tuvo lugar hace 180.000 años, fue el último evento geológico de gran magnitud en la isla canaria. Un equipo liderado por el instituto Geociencias Barcelona ha reconstruido el suceso. Las conclusiones del estudio están orientadas a mejorar el Plan de Emergencias Volcánicas de Canarias (Pevolca).
Los seísmos no parecen afectar a esta península mexicana, aunque sí los huracanes. Sin embargo, el hallazgo de crestas de rocas de cinco metros de altura en la costa, provocadas por olas extremas, hacen sospechar de eventos sísmicos importantes en la zona durante el Holoceno. Los científicos sugieren revisar los protocolos de riesgos sísmicos y tsunamis del área.
Investigadores del Instituto de Ciencias del Mar del CSIC han desarrollado un modelo conceptual que permite conocer con antelación el comportamiento de los grandes terremotos en función de su profundidad y la rigidez de las rocas. También puede estimar el potencial de los sismos para generar tsunamis de una forma más precisa que con los métodos actuales.
V.Sallarès, C. R. Ranero/Nature
El tsunami que arrasó la costa japonesa en marzo 2011 generó millones de desechos plásticos que acabaron en el océano, surcando los mares durante años hasta llegar a otros continentes como América. Ahora, un equipo de científicos estadounidenses ha descubierto que cerca 300 especies animales han sobrevivido al tiempo y la distancia a bordo de estas basuras, que se convierten en el nuevo medio de transporte de especies invasoras marinas.
A la caza ilegal, que acecha al rinoceronte de Java, uno de los mamíferos más amenazados del mundo, se unen otros peligros como la actividad volcánica y el riesgo de tsunami en la isla indonesia, según un nuevo estudio. Los científicos proponen establecer nuevas poblaciones de estos animales, protagonistas de #Cienciaalobestia, lejos de las zonas donde pueden ocurrir catástrofes naturales.
Los mayores de 65 años que sobreviven a un desastre natural se enfrentan a la ausencia de cuidados médicos, a la pérdida de familiares, amigos y hogares y al aislamiento social, lo que repercute en su salud mental. Tras encuestar a más de 3.500 ancianos supervivientes del terremoto y el tsunami que asolaron Japón en marzo de 2011, un equipo de científicos revela que la pérdida cognitiva aumenta, sobre todo, por la destrucción de sus casas.