Un nuevo estudio cuantifica la interacción temporal entre la actividad eléctrica de neuronas de cinco áreas corticales de dos primates. Los resultados indican que, para llevar a cabo la tarea cognitiva, son necesarias dependencias bidireccionales entre áreas sensoriales y motoras que se mantienen incluso durante intervalos de la tarea en que las neuronas por sí solas no codifican información sobre el estímulo.
Los grupos de neandertales dividían algunos de sus trabajos según el sexo después de cazar. Eso es lo que prueban las diferentes estrías en los dientes femeninos y masculinos de individuos adultos hallados en los yacimientos de El Sidrón (Asturias), L’Hortus (Francia) y Spy (Bélgica). Este rasgo de comportamiento se asociaba hasta ahora solo a los Homo Sapiens.
Investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid y del Hospital de Neurorrehabilitación Institut Guttmann colaboran en el desarrollo de un innovador sistema para la telerehabilitación y estimulación cognitiva que ofrece tratamientos más personalizados, intensivos y económicos.