Los sistemas binarios donde un agujero negro ‘devora’ a una estrella compañera son bien conocidos en astronomía, pero en la vecina galaxia de la Gran Nube de Magallanes se ha encontrado uno donde el agujero negro no está activo, no emite potentes niveles de rayos X, mientras danza junto a una estrella azul.
Investigadores del Instituto de Astrofísica de Andalucía han observado que alrededor de la estrella binaria SVS 13, todavía en fase embrionaria, el material primigenio se reparte en tres discos que pueden dar lugar a otros tantos sistemas planetarios: uno en torno a cada estrella y otro común alrededor de las dos.
En 2020 se anunció el descubrimiento de un agujero negro a tan solo 1000 años luz de distancia, en un sistema estelar binario llamado HR 6819. Ahora se informa de que sus dos estrellas están solas, aunque en una etapa rara y corta donde se produce ‘vampirismo’.
Sin necesidad de prismáticos ni telescopios, desde el hemisferio sur se pueden observar las dos estrellas del sistema HR 6819, localizado a tan solo 1.000 años luz de la Tierra. Ahora los astrónomos acaban de descubrir que escondía un tercer objeto: un agujero negro, el más cercano a nosotros encontrado hasta ahora.
Investigadores del Instituto de Astrofísica de Andalucía y otros centros internacionales han descubierto dos estrellas enanas blancas que giran cada 20 minutos en torno a un centro de masas en su sistema binario. Además, se han 'achatado', presentan forma elipsoidal por las fuerzas de marea y se acercan gradualmente debido a la emisión de ondas gravitatorias.
Con un telescopio sencillo de 20 centímetros de diámetro se pueden detectar los cambios de luz que producen algunos agujeros negros cuando, de vez en cuando, emiten enormes cantidades de energía. Lo ha demostrado un equipo internacional de astrofísicos al observar V404 Cygni, un sistema binario de estrella y agujero negro que ‘despertó’ el año pasado en la constelación del Cisne.
Imagen artística del sistema binario eclipsante pulsante, con la pre enana blanca delante de un 'sol'. / Keele University
Un equipo de científicos europeos, con participación del Instituto de Ciencias del Espacio (CSIC-IEEC), ha encontrado un sistema binario de dos estrellas compuesto por un ‘sol’ y una pre enana blanca. En esta última los científicos han observado por primera vez pulsaciones no radiales, según anuncian en la revista Nature.
Un equipo internacional, liderado por investigadores del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), revela esta semana en Science los detalles de un agujero negro dispuesto de una forma especial, de canto, en el sistema binario Swift J1357.2-0933. Es la primera vez que se observa un agujero negro con esta inclinación y la primera vez que se detectan eclipses de brillo en este tipo de sistemas.
Concepción artística que muestra una estrella rezagada azul creándose por la transferencia de masa en un sistema estelar binario. Pronto la estrella gigante (en la parte superior izquierda de la imagen) donará lo que le queda de su envoltura, dejando sólo un núcleo de enana blanca (con la mitad de la masa solar) como compañero de la rezagada azul.