Hace más de un siglo se encontró una momia egipcia de un adolescente, con una antigüedad de unos 2.300 años, y quedó olvidada en el Museo Egipcio de El Cairo. Tras escanear ahora su cuerpo, se ha comprobado que tiene 49 amuletos, incluyendo una fina lengua de oro para hablar en la otra vida, un escarabajo dorado para silenciar al corazón durante el Día del Juicio y la figura de dos dedos unidos junto al pene para proteger la incisión del embalsamamiento.
Arqueólogos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas han descubierto en Luxor, Egipto, el sarcófago intacto de un niño que vivió durante la época de la dinastía XVII, alrededor del año 1550 antes de nuestra era.