Un pequeño copépodo de apenas unos milímetros es capaz de generar pérdidas millonarias a la industria piscicultora. El noruego Esben Beck, un inventor autodidacta, ha desarrollado un robot que detecta el parásito sobre la piel de los peces y acaba con ellos.
La interacción del calentamiento constante de las aguas dulces y del océano, el cambio hidrológico y los brotes de enfermedades han provocado décadas de declive del salmón en el sur de Europa. Centrada en el río Sella (Asturias), una investigación coordinada desde la Universidad Complutense de Madrid analiza factores locales y globales relacionados con el cambio climático y alerta del peligro de extinción de este pez si no se adoptan estrategias de adaptación a esta situación ambiental.
Las náyades o mejillones de río (Margaritifera margaritifera), muy abundantes en el noroeste español hace un siglo, casi han desaparecido por completo en la cuenca del Duero. Los últimos estudios de investigadores de la Universidad de Salamanca alertan de la inexistencia de ejemplares jóvenes que garanticen su continuidad en las próximas décadas. El cambio climático y las alteraciones que el ser humano ha provocado en los ríos parecen estar detrás de la decadencia de esta especie, directamente dependiente de peces como el salmón o la trucha.
Investigadores de la Universidad de Oviedo han desarrollado un método para marcar la pólvora, lo que permite detectar su uso ilegal incluso después de su detonación. La técnica, basada en la adición de isótopos, también se puede aplicar para seguir y diferenciar a los peces salvajes, como truchas y salmones, de los de piscifactoría.
Desde hace años se pescan cada vez menos salmones atlánticos (Salmo salar) en capturas deportivas en los ríos asturianos. La razón, la presión de la pesca y los efectos del calentamiento global están mermando cada vez más a estos peces. Así lo revelan científicos españoles y británicos que confirman que las poblaciones del norte de España y el sur de Francia están en recesión.
Un joven salmón plateado (Oncorhynchus kisutch), instantes antes de comerse a un salmón rojo (Oncorhynchus nerka) recién nacido en Bear Creek, Alaska (EE UU).
El río Fraser en Canadá es conocido por las grandes remontadas de sus salmones rojos.
Huevas de merluza.
En la imagen se ve un ejemplar juvenil de salmón Chinook. Foto: Melinda Jacobs.