El algoritmo EN-PESA contribuirá a personalizar el riesgo cardiovascular, lo que se traducirá en tratamientos y planes de seguimiento más personalizados. El modelo de aprendizaje automático está basado en variables como la edad, tensión arterial, dieta y marcadores medibles en análisis de sangre y orina.
El Proyecto CHAI evalúa la relación entre presión arterial y partículas finas y el carbono negro en más de 5.500 personas de un área periurbana de India. Los resultados revelan que un aumento mínimo en la exposiciónse asocia con un 4 % más de prevalencia de hipertensión en las mujeres. Sin embargo, en los hombres las asociaciones fueron estadísticamente débiles.
Los trastornos de hipertensión durante el embarazo son una de las principales causas de mortalidad y morbilidad materna y fetal. Un nuevo estudio analiza el impacto de la exposición a 21 sustancias tóxicas no persistentes, como los ftalatos, parabenos o bisfenol A, en la presión arterial de mujeres embarazadas.
Científicos de la Universidad de Salamanca han estudiado cómo mejorar los mecanismos responsables de la hipertensión de aquellos pacientes a los que no les baja la presión arterial por la noche. Los resultados acaban de ser publicados en la revista Diseases Models and Mechanisms.
La presión sanguínea modula la tendencia de cada persona a preocuparse y puede asociarse a un efecto ‘tranquilizador’ cuando es elevada. Así lo indica un nuevo estudio, liderado por investigadores españoles, que refleja que se puede aprender de forma implícita a aumentar la tensión arterial como modo de aliviar la tensión y el malestar emocional.
La presión arterial debe ser más alta por el día que por la noche, puesto que lo contrario se asocia a un mayor riesgo cardiovascular. Ahora, un amplio estudio realizado con pacientes españoles demuestra que el ejercicio físico regular contribuye al descenso de la presión arterial en horas nocturnas.
El doctor Bouchard (Quebec, 1939) practicó hockey sobre hielo hasta que sus compañeros crecieron más que él: “Era bueno, pero me di cuenta de que me iban a matar”. Ahora, a sus 73 años, pesca con mosca y va al gimnasio. El proyecto de este especialista, que dirige el Laboratorio de Genómica Humana del Centro de Investigación Biomédica de Pennington (EEUU), es reunir 5.000 sujetos para estudiar por qué hay tantas diferencias en la respuesta de cada persona al ejercicio físico. Hace unos días, en Barcelona, asistió al congreso sobre ciencia del deporte del European College of Sport Science.
Soportar el ruido de los aviones puede provocar aumentos de tensión