Un equipo internacional de astrónomos, en el que participa el Instituto de Astrofísica de Canarias, ha establecido por primera vez que la composición de los planetas rocosos está íntimamente ligada a la de la estrella que los alberga. Los autores señalan que este hallazgo podría ayudar a identificar planetas similares al nuestro.
Hasta ahora los científicos consideran que los planetas rocosos surgen de los discos de materia que rodean las estrellas recién nacidas. Pero, por primera vez, un equipo de astrónomos ha observado un disco polvoriento similar alrededor de una enana marrón, una ‘estrella fallida’. El sorprendente hallazgo sugiere que los planetas rocosos pueden ser más comunes de lo que se pensaba.