Entre cientos de embriones de tiburón cuyas madres fueron pescadas en el Mediterráneo, científicos de la Universidad de Málaga advirtieron uno diferente. El ejemplar de Galeus atlanticus, protagonista de #Cienciaalobestia, tenía dos cabezas y un solo cuerpo. Es la primera vez que se encuentra esta malformación en una especie de tiburón ovípara.
Un equipo de investigadores de la Facultad de Biología de la Universidad de Santiago (USC) está estudiando el sistema nervioso central de los tiburones. La finalidad es avanzar en el conocimiento de la evolución del cerebro en vertebrados a través de la búsqueda de genes comunes que regulan su desarrollo.