Entre cientos de embriones de tiburón cuyas madres fueron pescadas en el Mediterráneo, científicos de la Universidad de Málaga advirtieron uno diferente. El ejemplar de Galeus atlanticus, protagonista de #Cienciaalobestia, tenía dos cabezas y un solo cuerpo. Es la primera vez que se encuentra esta malformación en una especie de tiburón ovípara.