Fueron llamados ‘héroes sin capa’ durante los peores momentos de la pandemia de COVID-19. A las patologías físicas de aquellos contagiados por el virus, se une una salud mental deteriorada. Una revisión de artículos, publicada en el Journal of Affective Disorders, analiza su efecto y qué pasaría ante una segunda oleada de la enfermedad.
A principios de 2020, los síntomas de depresión y ansiedad y el miedo a sufrir agresiones en el trabajo empeoraron entre los médicos residentes en Shanghái, una de las primeras urbes en hacer frente al coronavirus. “Necesitamos priorizar el bienestar de los trabajadores de la salud, no solo por ellos, sino también por los pacientes que los necesitarán en los próximos meses”, reclama el investigador principal.
Una investigación realizada por la Universidad Complutense de Madrid muestra cómo el 79,5 % de los sanitarios sufren ansiedad y el 40 % se siente emocionalmente agotado tras la primera oleada de atención hospitalaria por COVID-19. Los autores recomiendan una rápida atención psicológica para proteger su salud ante la llegada de posibles rebrotes.
Un informe del Instituto de Salud Carlos III ha analizado los 30.660 casos de COVID-19 entre sanitarios y declara que casi un 11 % ha tenido que ser hospitalizado. Los hombres representan menos de la cuarta parte de las infecciones en este colectivo y sus casos fueron los más graves.
Un primer estudio serológico en personal sanitario del Hospital Clínic de Barcelona revela una prevalencia de infección por SARS-CoV-2 menor a la esperada. Solo el 11,2 % de los profesionales que se sometió a los test ha contraído el virus.
Comprobar la eficacia de la profilaxis preexposición frente al SARS-CoV-2 para evitar nuevas infecciones en el personal sanitario de los hospitales españoles es el objetivo del ensayo clínico promovido por el Ministerio de Sanidad, que evaluará el riesgo de desarrollo de la COVID-19 en 4.000 profesionales de 62 centros.
Profesionales de la salud han sufrido conductas discriminatorias por miedo a que puedan suponer un foco de contagio de la COVID-19. El presidente del Consejo General de Enfermería de España, Florentino Pérez Raya, anima a las víctimas a denunciar los hechos y defiende que el personal sanitario es el primer interesado en que no haya más víctimas.
La situación actual de la epidemia causada por la COVID-19 supone una prueba para todo el sistema de salud. Ricardo Martino Alba, experto en cuidados paliativos del Hospital Infantil Universitario Niño Jesús de Madrid, analiza cómo influye en los profesionales, pacientes y familias esta situación y afirma cómo la fragilidad del ser humano debe ser el eje central de la atención sanitaria.