Un equipo de científicos de varias instituciones españolas, encabezado por el CSIC, ha logrado reducir hasta 1.000 millones de veces el tamaño de los Planar array chips, utilizados para realizar observaciones a nivel celular en el desarrollo de enfermedades. El trabajo, publicado en Advanced Materials, abre la posibilidad a estudios más precisos en medicina.
Expertos en oncología, entre ellos, el español José Baselga, uno de los mayores especialistas del mundo en cáncer de mama, se han reunido en Madrid en el Simposio Internacional sobre el cáncer organizado por la Fundación Ramón Areces. La medicina personalizada, los nanomedicamentos y los tratamientos basados en la inmunomodulación son las tres nuevas terapias que ya están dando resultados prometedores en la lucha contra la enfermedad.
Científicos de centros de investigación de Zaragoza y Barcelona han encontrado una molécula magnética que se puede fijar al silicio u otro material manteniendo sus propiedades magnéticas y de refrigeración a bajas temperaturas. El hallazgo, que publica la revista Advanced Materials, puede ayudar al desarrollo de microchips 'criogénicos' que sustituyan a los grandes equipos de refrigeración, como los que se usan en el espacio.
Introducir chips en células vivas para su estudio, diagnóstico y tratamiento es un viejo sueño que está cada vez más cerca. Un grupo de investigadores del CSIC ha demostrado, en una serie de experimentos cuyos resultados se publican en la revista Small, que la actual tecnología ya permite crear chips de silicio, más pequeños que células vivas, introducirlos en las mismas e interaccionar con ellas, si bien muchas de las aplicaciones que pueden derivarse de ello aun están lejanas. Y todo ello a un coste relativamente bajo. En el trabajo han participado investigadores de tres institutos: el Instituto de Microelectrónica de Barcelona, el Centro de Investigaciones Biológicas y el Instituto de Investigaciones Químicas y Ambientales de Barcelona.