Hasta ahora se pensaba que los materiales topológicos, con importantes propiedades electrónicas definidas por su propia estructura cristalina, eran raros y exóticos, pero investigadores del centro DIPC y la Universidad de Princeton han descubierto que más de la mitad de los materiales 3D conocidos son topológicos y que casi el 90 % albergan estados topológicos latentes. Estos podrían tener aplicaciones extraordinarias, incluida la computación cuántica.
Los metales topológicos presentan propiedades ‘exóticas’, cuya magnitud es proporcional a un parámetro llamado número de Chern. Ahora, por primera vez, se ha logrado alcanzar el máximo valor de ese número de forma experimental utilizando cristales quirales de paladio y galio.
Un equipo internacional de investigadores, con participación del Donostia International Physics Center (DIPC), ha descubierto un material topológico dotado de quiralidad, la propiedad que tienen los objetos de no ser superponibles con su imagen especular. Se trata de un cristal de aluminio y platino con una configuración en forma de escalera espiral que confiere propiedades electrónicas nunca vistas.
La investigadora Maia García Vergniory está tratando de desentrañar los misterios de nuevos materiales, llamados topológicos, en los que se podrán basar los futuros dispositivos de baja potencia y los ordenadores cuánticos. Hasta ahora, solo se han encontrado 200. Ella y su equipo han desarrollado un nuevo método con el que esperan descubrir miles de ellos.
Investigadores de la Universidad del País Vasco y el centro donostiarra DIPC han desarrollado, junto a colegas de Alemania y EE UU, una nueva teoría de 'química cuántica topológica' para mejorar la caracterización de los materiales topológicos, que ofrecen propiedades electrónicas prometedoras definidas por su propia estructura cristalina. El estudio ha sido portada de la revista Nature.