Un equipo de investigadores de varias universidades españolas ha descubierto que la personalidad no influye demasiado al escoger las relaciones sociales de amistad en la educación secundaría. El trabajo, que ha utilizado técnicas de inteligencia artificial en el análisis, señala que estas elecciones se basan más en la cercanía de los contactos.
Investigadores europeos han desarrollado un modelo de aprendizaje automático que, partiendo de los niveles en sangre de 14 proteínas, es capaz de pronosticar si una persona en estado grave a causa del coronavirus saldrá o no con vida de la unidad de cuidados intensivos. En una prueba con 24 pacientes críticos ha acertado la evolución de 23.
La investigadora madrileña había trabajado en los videojuegos y la moda hasta que la Fundación Bill y Melinda Gates la fichó. Su experiencia en modelos de machine learning y de predicción del comportamiento servirá para mejorar las apps de aprendizaje que usan las matronas en países con menos recursos. El objetivo es reducir las muertes de madres y bebés durante el embarazo y el parto.
Investigadores de EE UU y Brasil han desarrollado un sistema que ayuda a garantizar que los algoritmos de aprendizaje automático, usados en IA, funcionen adecuadamente y no reproduzcan sesgos discriminatorios. La técnica ha sido probada con éxito en aplicaciones de educación y salud.
El Atlas de la Desigualdad es un mapa interactivo hecho a partir de datos de geolocalización de móviles para saber dónde se encuentran personas de diferentes ingresos en su tiempo de ocio, trabajo y consumo. La iniciativa, liderada por el español Esteban Moro, ya ha analizado el mapa de Boston y se va a extender a otras once ciudades, entre ellas, Madrid y Nueva York.
Investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid han desarrollado un sistema de análisis de texto que, aplicado a los comentarios publicados en las redes sociales, detecta y clasifica las quejas sobre contaminación acústica de forma automática. El sistema combina la inteligencia artificial con técnicas de análisis de lenguaje.
Las técnicas de aprendizaje automático, que usan las matemáticas para identificar patrones en conjuntos de datos, son una herramienta poderosa en campos como la biomedicina y la física aplicada, pero existen áreas de aplicación a los que no llegan debido a su complejidad o a las limitaciones de los algoritmos utilizados. Un estudio internacional, en el que ha participado el Instituto de Ciencias Fotónicas (ICFO), revisa las aportaciones que puede hacer el aprendizaje automático cuántico, respecto al clásico, para resolver el problema.