Hasta ahora, se consideraba que los neandertales eran la primera especie con lateralidad bien definida. Un estudio internacional liderado por el Instituto Catalán de Paleocología Humana y Evolución Social remonta este hecho hasta la primera especie asociada a nuestro género, Homo habilis.
La lateralidad está relacionada con la forma de organización del cerebro humano y asigna roles distintos a cada una de las extremidades al realizar una tarea determinada. Una investigación de la Universidad del País Vasco ha estudiado su origen y desarrollo para comprender mejor la organización cerebral y sus asimetrías, y saber cómo han evolucionado estas a lo largo de la historia.