En plena polémica por el cierre definitivo del proyecto gasista Castor, debido a los terremotos registrados en 2013, investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid acaban de publicar un trabajo que respalda que la sismicidad anómala registrada tras la inyección está relacionada con las operaciones en la plataforma. El estudio, que ha permitido describir la actividad sísmica antes y después de las operaciones, ofrece datos que pueden ser utilizados como indicadores para monitorizar terremotos en el futuro.
Una pequeña aguja basta para introducir una nueva malla electrónica flexible en cavidades y tejidos de seres vivos. Este sistema, desarrollado por científicos chinos y estadounidenses, ha sido probado con éxito en ratones. Los electrodos de la red fueron capaces de trabajar con las neuronas y permitieron monitorizar la actividad del cerebro.
El dispositivo portátil es conocido como 'lab on a chip' y más bien parece una tarjeta de crédito, pero es capaz de realizar análisis químicos a través de canales de dimensiones reducidas. El nuevo método de producción permitirá bajar su coste final