La cuenta atrás para la puesta en marcha del Gran Colisionador de Hadrones (LHC por sus siglas en inglés) ha comenzado este mes. Los científicos del CERN están realizando pruebas e inyecciones parciales de partículas para testar la máquina. A principios de octubre, el Centro de Control inyectó haces de protones y luego iones pesados a través de las líneas de transferencia TI2 y TI8 que conectan el SPS (el preacelerador) con el LHC. Tras culminar esta operación con éxito, los operadores del LHC detuvieron el haz justo a las puertas del gran acelerador. Ahora sólo queda esperar a que todos los imanes del LHC se enfríen a su temperatura nominal de 1,8 Kelvin y a que todos los aceleradores se encuentren totalmente en servicio antes de inyectar el haz en el círculo completo.