Investigadores del Vall d’Hebron Institut de Recerca han analizado la microbiota de más de un centenar de pacientes –el mayor publicado hasta la fecha– con intestino irritable. El estudio demuestra que el tratamiento debe ser diferente en cada paciente según su tipo de síndrome.
Investigadores del VHIR han descubierto una mayor actividad inmunitaria en el yeyuno de los pacientes con SII y diarrea. El hallazgo podría usarse como marcador biológico para identificar esta enfermedad que actualmente solo se diagnostica por criterios clínicos y por descarte de otras patologías.