Una investigación liderada por la Universidad Complutense de Madrid ha analizado el linaje materno de 16 individuos datados entre los siglos V a.C. y V d.C. Se trata de los primeros restos identificados molecularmente en territorio continental español procedentes o descendientes de individuos de Fenicia.
Un equipo arqueológico ha logrado reconstruir un taller metalúrgico de origen fenicio con los restos hallados en unas excavaciones que se realizaron entre 2015 y 2017 en el yacimiento Cabezo Pequeño del Estaño, en Guardamar del Segura (Alicante).
El equipo del Laboratorio de Arqueología del Departamento de Humanidades de la UPF, bajo la dirección de M. Eugenia Aubet, Catedrática de la UPF e investigadora principal del proyecto "Necrópolis de Tiro-Al Bass"; conjuntamente con arqueólogos libaneses, han identificado más de un centenar de urnas funerarias, de 50 centímetros de profundidad, cerradas herméticamente, con huesos calcinados en su interior y dispersas en una superficie de 300 metros cuadrados, destinadas a albergar los cuerpos incinerados de los difuntos.