Investigadores del CRESIB, centro de investigación del Instituto de Salud Global de Barcelona, han observado que las fluctuaciones diarias en la temperatura predominante alteran la sensibilidad de las especies al calentamiento provocado por el cambio climático mediante la reducción de los márgenes de seguridad 'térmica'. En concreto, los seres vivos ectotermos, caracterizados por depender de fuentes externas para la obtención de calor, como es el caso de los reptiles y los artrópodos, son particularmente vulnerables al calentamiento por el cambio climático y están expuestos a las fluctuaciones diarias de temperatura de su hábitat.