El lanzador Vega-C de la Agencia Espacial Europea, con unas capacidades muy superiores a su predecesor, ha completado sin problemas su vuelo inaugural. Su carga principal ha sido un satélite italiano, pero también ha transportado seis pequeños CubeSats.
Después de años de ensayos y fracasos, la compañía SpaceX ha logrado por fin aterrizar un cohete no tripulado, el Falcon-9, tras despagar y soltar varios satélites en el espacio. La hazaña supone todo un hito en la reutilización de cohetes, un avance que ayudará a reducir los costes de los lanzamientos y el problema de la basura espacial.
Un resto de basura espacial cae en un sembrado de Murcia. / EFE/Guardia Civil
La Agencia Espacial Europea (ESA) ha lanzado su nuevo vehículo experimental IXV desde la Guayana Francesa hasta 413 kilómetros de altura, para recogerlo unos cien minutos después en las aguas del Pacífico. El ensayo sirve para testear la última tecnología europea de reentrada de naves en la atmósfera y sistemas espaciales reutilizables.
Un equipo de investigadores suizos y alemanes ha colocado un plásmido de ADN en la superficie de un cohete para ver si sobrevivía durante un vuelo balístico suborbital. Los resultados revelan que el ADN soportó las altas temperaturas del lanzamiento, el duro viaje y la reentrada en la Tierra, donde muchas de las moléculas seguían manteniendo sus propiedades.
Plásmidos de ADN sujetos al exterior de un cohete pueden sobrevivir al lanzamiento y al vuelo espacial. / Adrian Mettauer