Dos equipos del CSIC colaboran para mejorar la eficacia de los medicamentos contra tumores y enfermedades autoinmunes. Para ello, desarrollan nanopartículas de óxido de hierro que podrán transportar los fármacos y actuar de manera localizada en el cuerpo del paciente, asegurando tratamientos personalizados con menos efectos secundarios que los actuales.
Científicos españoles han evaluado el uso de péptidos nanoencapsulados para inducir la apoptosis o muerte celular de las células. Su trabajo, publicado en Chemistry: A European Journal, abre una alternativa para el uso futuro de péptidos en terapia clínica.
Investigadores del Instituto de Investigaciones Tecnológicas de la Universidad de Santiago de Compostela trabajan en el diseño de nanopartículas que combatan las células cancerígenas mediante calor. El hallazgo consiste en aumentar la temperatura por encima de los valores considerados como normales –hipertermia– mediante campos magnéticos.
Científicos de la Universidad de Granada han descubierto que el ácido maslínico, presente en la hoja y cera de la piel de la aceituna, actúa sobre las células tumorales controlando sus alteraciones en los procesos de crecimiento. En la actualidad, la única planta de producción semi-industrial de esta sustancia a nivel semi-industrial que hay en todo el mundo se encuentra en la Facultad de Ciencias de la UGR.