El ojo dorado del telescopio espacial James Webb ha mostrado el universo con un detalle sin precedentes. Su puesta en marcha encabeza este año el ranking de los hitos científicos, entre los que también figuran el descubrimiento de la bacteria más grande del mundo, el desvío de un asteroide, ADN con dos millones de años de antigüedad, avances frente a los virus y la creatividad en la inteligencia artificial.
La simbiosis con un hongo hace a las plantas de arroz más productivas y resistentes a enfermedades, según investigadores españoles. El nuevo estudio, aplicado en arrozales del Delta del Ebro, plantea una estrategia prometedora para reducir el uso de pesticidas y promover la agricultura sostenible.
La inclusión de plástico indetectable por el consumidor o la falsificación de la calidad del producto son algunos de los fraudes a los que se enfrenta el tercer cereal más consumido en el mundo, el arroz. Un equipo de científicos liderado por españoles ha desarrollado una forma, basada en la inteligencia artificial, para hacer frente al engaño: fotografiar los granos de arroz para verificar el etiquetado.
Por primera vez en el mundo, investigadores de la Universidad Politécnica de Valencia han obtenido un hormigón celular, ligero y aislante en el que el 85% de sus materiales son residuos. Para fabricarlo se usa papel de aluminio doméstico, cenizas de cáscara de arroz y residuos procedentes de la fabricación de hierro o de la obtención de combustibles.
Un estudio realizado por investigadores de universidades madrileñas explora alternativas de adaptación al cambio climático del cultivo del arroz en los humedales de Doñana.
La agricultura genera entre el 10% y el 12% de los gases de efecto invernadero y el 47% de las emisiones de metano, mientras que al cultivo de arroz en campos inundados se le pueden atribuir entre el 5% y el 20% de las emisiones de metano. Un equipo de científicos prevé que las emisiones de efecto invernadero en este cultivo aumenten un 16% hasta 2020, por lo que sugieren mitigarlas, sin que esto afecte a la producción.
Un estudio internacional, en el que ha participado la Universidad Politécnica de Madrid, ha determinado cuánta agua se emplea en el cultivo de arroz según el sistema de siembra que se utilice. Los resultados revelan que no hay grandes diferencias en la evapotranspiración entre un sistema inundado y otro sin inundar, según el análisis que se ha efectuado en un arrozal californiano.
Un proyecto europeo, en el que participa el Centro de Investigación en Agrigenómica, está evaluando un sistema alternativo de producción de arroz. La práctica consiste en inundar los campos de dos a cinco centímetros de agua, dejarlos secar hasta que el suelo llegue al límite de humedad necesaria e inundarlos de nuevo. El nuevo método puede reducir entre un 15% y un 30% el consumo de agua y hasta un 48% de emisión de metano, sin disminuir la producción.
El arroz es uno de los pocos cereales que consumen las personas celiacas, ya que no contiene gluten; sin embargo, puede presentar concentraciones elevadas de un elemento tóxico: el arsénico. Así lo revelan los análisis efectuados por investigadores de la Universidad Miguel Hernández de Elche en harinas, pasteles, pan, pasta y otros alimentos elaborados con arroz. La Unión Europea está trabajando para establecer los límites máximos de arsénico en estos productos.
El contenido de arsénico de algunos productos para celiacos elaborados con arroz es elevado. / Sandra Munera-UMH