El consumo agudo de cannabinoides tiene efectos negativos, como catalepsia, inmovilidad y pérdida de memoria, que frenan su uso terapéutico. Ahora, un equipo científico con participación española ha descubierto que es en las mitocondrias, encargadas de producir energía en las células, donde el cannabis desencadena estos daños. El estudio abre la puerta a nuevos fármacos que aprovechen la acción analgésica de estos compuestos sin causar sus efectos indeseados.
Una operación para curar la epilepsia causó a Henry Molaison amnesia pura. Tras su muerte en 2008, cedió su cerebro para que se estudiase esta rara consecuencia. El análisis de los 2.401 cortes en los que fue divido el órgano ha permitido crear un mapa en 3D sobre la memoria y el hipocampo.
El jurado internacional del duodécimo Premio de Investigación Fundación Dr. Antonio Esteve ha concedido el galardón al grupo de Rafael Maldonado, del Laboratorio de Neurofarmacología de la Universitat Pompeu Fabra (UPF), por el hallazgo de los mecanismos implicados en uno de los efectos más perjudiciales del consumo de cannabis: la pérdida de memoria.
El equipo de científicos confirmó que, a pesar de no recordar haber visto una película triste o alegre, los pacientes con amnesia mantenían elevados niveles de tristeza o alegría respectivamente.
Investigadores de la Unidad de Neurofarmacología de la Universidad Pompeu Fabra han identificado la diana específica sobre la cual actúan los cannabinoides y el mecanismo de acción por el que causa pérdida de memoria. Esta investigación supone un primer paso para desarrollar estrategias terapéuticas contra los efectos negativos del consumo de cannabis.