La viróloga, que trabaja en una vacuna de ARN autorreplicativa y esterilizante contra la covid-19, considera que la nueva ola tendrá menos impacto gracias a la vacunación, pero llama a no bajar la guardia.
Las desacertadas presentaciones de los datos de hospitalización, ingresos en UCI o fallecimientos en personas vacunadas y no vacunadas que estamos viendo estos días en algunos medios de comunicación y redes sociales están generando confusión sobre la efectividad de estas preparaciones.
El organismo internacional recomienda reforzar las estrategias de prevención ante la irrupción de la nueva variante. Además, evidencia la importancia de una estrategia de vacunación global que impida que surjan de nuevas mutaciones del virus en los países con menor tasa de vacunación.
Confirmado el primer caso por el hospital Gregorio Marañón de Madrid, el Consejo de Ministros aprobará este martes una serie de medidas restrictivas que se suman a la cuarentena exigida a los viajeros procedentes del sur de África.
España ha anunciado los primeros casos detectados de ómicron. ¿Qué medidas habría que tomar para detener su expansión? ¿Es siquiera posible? Especialistas en epidemiología y salud pública coinciden en que las limitaciones a los vuelos no son la solución, y en que para reducir la transmisión es urgente ampliar la vacunación, no solo en los países ricos, sino en todo el planeta.
Según la agencia europea, la efectividad de la vacuna de Pfizer es del 90,7 % para la prevención de la covid-19 sintomática en niños de esa franja de edad. La inyección se administrará en dos dosis, con un intervalo de tres semanas entre la primera y la segunda.
Varias expertas advierten de que la alta cobertura vacunal en España mitigará la nueva ola pero no la eliminará: aunque las vacunas previenen la enfermedad grave, no son un escudo infranqueable y deben ser complementadas con medidas de comportamiento.
El Centro Europeo de Prevención y Control de Enfermedades ha recomendado una tercera dosis vacunal, una petición a la que se ha sumado Ursula von der Leyen, presidenta de la CE. El objetivo es reducir las hospitalizaciones y evitar más muertes en un momento crítico, el el que países como Alemania, República Checa, Eslovaquia y Hungría registran máximos de contagios diarios por coronavirus.
Las vacunas de ARNm contra la covid-19 pueden generar anticuerpos capaces de reconocer un antígeno viral, la proteína N, usado en algunas pruebas diagnósticas para detectar la infección por SARS-CoV-2. Por ello, un porcentaje considerable de casos se clasificarían falsamente como infecciones asintomáticas.
Países europeos están aplicando estrategias anticovid en la población sin vacunar. Austria hará la vacunación obligatoria tras extender su confinamiento dirigido a los no vacunados a toda la población. En Alemania, las personas sin inmunizar tienen acceso restringido a restaurantes y hoteles, y deben mostrar un test negativo en el transporte público. Eslovaquia también ha impuesto restricciones a quienes han decidido no vacunarse. Suecia introducirá un pasaporte covid en eventos de más de cien personas. ¿Qué efecto tienen estas políticas?