Coloridas piscinas hidrotermales hipersalinas e hiperácidas de Dallol. / Puri López-García
Los seres vivos, especialmente los microorganismos, tienen una capacidad sorprendente para adaptarse a los ambientes más extremos de nuestro planeta, pero quedan lugares en los que no pueden sobrevivir. Investigadores europeos han confirmado la ausencia de vida microbiana en algunas charcas saladas, calientes e hiperácidas del campo geotermal de Dallol, en Etiopía.
La comparación de telómeros de cabras, delfines, gaviotas, renos, buitres, flamencos, elefantes, ratones y humanos revela que las especies cuyos telómeros se acortan más rápido viven menos tiempo. Los autores consideran que han encontrado un patrón universal que explica la duración de la vida.
Ha sido testigo y artífice de muchos de los hallazgos de fósiles humanos que se han producido en Atapuerca y otros yacimientos en las últimas décadas. A punto de publicar su nuevo libro, el paleoantropólogo Juan Luis Arsuaga confiesa que su cargo más importante es el de profesor en la universidad.
El cambio climático afecta a la disponibilidad del hierro, zinc, manganeso y cobre, elementos esenciales para la fotosíntesis vegetal y el crecimiento y reproducción animales. Esta es la principal conclusión de un estudio liderado por la Universidad Autónoma de Madrid, con participación del Consejo Superior de Investigaciones Científicas.
A partir del estudio de las características ecológicas de cerca de 6.600 especies europeas de macroinvertebrados acuáticos –como escarabajos, mosquitos o libélulas– un equipo internacional de investigadores, liderados por la Universidad de Barcelona, han reconstruido qué espacio funcional ocupa cada una de ellas. De esta forma, han analizado cómo han evolucionado y se han diversificado desde que se originaron.
Algunos de los árboles que pueblan hoy la Tierra son más antiguos que las pirámides egipcias y han sido testigos de los últimos 5.000 años de historia humana. Un equipo de científicos ha secuenciado el genoma del roble, que se expande por tres continentes, para comprender qué se esconde detrás de su larga vida. El estudio demuestra que el sistema inmunitario desempeña un papel clave para asegurar su supervivencia centenaria.
Un nuevo estudio ha identificado centenares de fragmentos del genoma sin función aparente, pero que tienen capacidad para generar nuevas proteínas y, potencialmente, convertirse en nuevos genes. El trabajo, publicado la revista Nature Ecology and Evolution, ha permitido identificar mediante técnicas de secuenciación masiva una gran cantidad de proteínas nuevas en el genoma del ratón.
La composición de los siete planetas que orbitan la cercana estrella TRAPPIST-1 es básicamente rocosa y, potencialmente, algunos podrían albergar más agua que la Tierra, según un nuevo estudio. Incluso algunos de estos exoplanetas podrían tener hasta un 5% de su masa en forma de agua volátil, aproximadamente 250 veces más que los océanos de la Tierra.
El cazador de planetas HARPS del Observatorio Europeo Austral (ESO) ha descubierto el planeta Ross 128b, de un tamaño similar a la Tierra, a tan solo 11 años luz del sistema solar. Se trata del segundo planeta templado más cercano a nosotros tras Próxima b. También es el que está más cerca orbitando alrededor de una estrella enana roja inactiva, una circunstancia que aumenta las probabilidades de albergar vida.