Desde ahora la sonda empezará a observar la radiación de fondo, y ése es sólo el principio del trabajo, ya que después, los datos recogidos deberán ser analizados meticulosamente. En los próximos años nuestro conocimiento sobre los primeros instantes del Universo habrá aumentado.
Dos telescopios espaciales, Planck y Herschel, de la ESA, serán lanzados mañana, 14 de mayo, en un cohete Ariane 5 ECA, desde el Puerto Espacial de la ESA en Kourou, en la Guayana Francesa. Su puesta en marcha supone un gran paso adelante para el conocimiento sobre la historia y la composición del Universo.
La cuenta atrás está a punto de iniciarse. Este jueves, 14 de mayo, la base de Kouru, en la Guayana Francesa, será el escenario del lanzamiento de dos misiones espaciales europeas que jugarán un papel fundamental para avanzar en el conocimiento del universo. La alta tecnología volcada en los instrumentos de los satélites Herschel y Planck permitirá a los científicos estudiar la formación de estrellas y galaxias y obtener nuevos datos sobre la radiación fósil del Big Bang, gracias a la posición privilegiada que alcanzarán estos ojos espaciales que serán lanzados a bordo del cohete Ariane 5 ECA.
Tal vez fuese un encuentro breve, pero muy fructífero. José Alberto Rubiño, investigador del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), tiene facilidad para hacerse entender y sabe cómo utilizar el lenguaje para que cualquier persona pueda entender algo tremendamente complejo. Si alguien le habla del fondo cósmico de microondas, la reacción más normal sería quedarse con cara de bobo. Sin embargo, si le explican que se podría decir que es la huella dactilar de Big Bang, la cosa cambia. El tema todavía se vuelve más interesante al conocer que esta radiación ha llegado hasta nuestros días y que con su estudio se pueden saber datos como la evolución del Universo, su estructura o las formas de materia y energía que existen.