Un equipo del Instituto Pirenaico de Ecología (CSIC) ha cuantificado la magnitud del cambio de temperaturas y precipitaciones previsto para el periodo comprendido entre los años 2070 y 2100 en el Pirineo. Para ello, analizaron la capacidad de seis modelos regionales de predicción para reproducir las condiciones climáticas observadas en la zona de 1960 a 1990. Los científicos prevén un aumento térmico de 2,8º C en la cordillera pirenaica, con un escenario de emisión de gases medio-bajo, y 4º C, con uno de emisión de gases medio-alto.