El análisis de los genomas de individuos procedentes de más de 280 grupos étnicos de todo el mundo permite describir la diversidad genética en unas regiones hasta ahora poco estudiadas, como las de los aborígenes de Australia y Papúa Nueva Guinea. Los resultados, que se publican en tres estudios diferentes en la revista Nature, arrojan luz sobre la migración de los humanos modernos fuera de África y sobre la diversidad genética actual.
Las guerras, la falta de recursos, la introducción de nuevas herramientas o las enfermedades son algunos de los factores que pueden provocar el declive de una población. Mediante una serie de indicadores un equipo de antropólogos ha concluido que hace 9.000 años las sociedades neolíticas mostraron señales de alerta antes de su colapso. El estudio de estos indicios podría predecir futuras alteraciones del ecosistema producidos por el cambio climático.
El aumento de las temperaturas, generado en parte por la frenética actividad humana y la superpoblación, está modificando los hábitats naturales y pone en peligro la biodiversidad del planeta. Las aves son algunos de los animales afectados, pero no todas las especies sufren por igual las consecuencias del cambio climático. Un nuevo estudio demuestra que incluso puede beneficiar a algunas. De las 96 especies estudiadas en España, 37 se han visto favorecidas y 59 perjudicadas.
La población de araos comunes, unas aves marinas que viven en los acantilados de la isla de Stora Karlsö en Suecia, está recuperándose después de haber sufrido un grave declive en los años 60. En la actualidad, los científicos aseguran que nunca había estado en mejores condiciones. Así lo revelan después de haber trazado su tendencia poblacional del último siglo gracias a las fotografías tomadas por los turistas que visitaron la isla.
Un estudio publicado en PLOS ONE y liderado por investigadores de CREAL-ISGlobal, evalúa los posibles riesgos y beneficios para la salud de la promoción del transporte activo para ir al trabajo en seis ciudades europeas, entre ellas, Barcelona. Para lograr esto, se necesita una colaboración estrecha y fuerte entre los profesionales de la salud, los especialistas en transporte y los planificadores urbanos en las ciudades.
Un nuevo estudio sobre la supervivencia en la vejez en Europa muestra que España es un país de contrastes. Las poblaciones del norte español, Madrid y Salamanca baten récords de edad, mientras algunas zonas del sur presentan los índices más bajos del continente. Las diferencias socioeconómicas pueden ser parte de los motivos.
Entre un 25% y un 30% de las mujeres nacidas en la segunda mitad de la década de los 70 del siglo pasado no será madre. Esta infecundidad está asociada al retraso de la edad de la primera maternidad y en las condiciones materiales y conyugales que rodean la decisión de tener hijos entre los 25 y 40 años de edad, según un estudio de la Universidad Autónoma de Barcelona. España encabeza el retraso en la maternidad en Europa, siendo la edad del primer hijo de las más elevadas del mundo en la actualidad.
A menudo se asume que la caza de algunos machos de animales como trofeos no tiene efectos en la conservación de estas especies, aunque apenas existen estudios sobre ello. Ahora, un equipo internacional de científicos, con participación española, ha explorado el caso del urogallo cantábrico (Tetrao urogallus cantabricus). Los resultados del análisis genético de estas aves apuntan a la caza selectiva de machos reproductores como la causa más probable del inicio del descenso poblacional.
La población mundial pasará de los actuales 7,3 mil millones de personas a 9,7 mil millones en 2050 y 11,2 mil millones a finales de siglo, según ha explicado John R. Wilmoth, director de la División de Población de las Naciones Unidas, en una sesión sobre previsión demográfica en el Joint Statistical Meetings 2015 celebrado hoy en Seattle (EE UU).
La secuenciación del genoma humano, iniciada hace 15 años, supuso un hito científico que ha permitido abrir nuevas oportunidades en la investigación en distintos ámbitos. Uno de ellos, permite conocer la historia de la evolución humana y su proceso de selección natural. Para descubrir el linaje genético del hombre, un equipo internacional de científicos ha analizado las variantes en el número de copias de los genes de 236 genomas humanos, procedentes de 125 poblaciones de diferentes regiones del mundo.