Un equipo del CSIC ha demostrado que la estructura i-ADN de nuestro genoma puede adaptar su forma al pH del ambiente. Este hallazgo es esencial para posibles avances en la nanotecnología o para modular procesos clave de la creación de fenotipos.
Usando iones emisores de luz, investigadores de la Universidad Autónoma de Madrid han desarrollado un procedimiento experimental para estudiar la estructura en la que se organizan las moléculas de agua teniendo en cuenta la temperatura. Los resultados muestran cómo algunos cambios en la estructura del agua dependen de su grado de acidez.
La paleontóloga Laia Alegret, de la Universidad de Zaragoza, ha contribuido a obtener la primera medida del pH de las aguas superficiales tras el impacto de un asteroide que produjo una extinción masiva a finales del Cretácico. Este estudio indica que su impacto en la Tierra, hace 66 millones de años. provocó la acidificación de los océanos.
Laia Alegret (izquierda) junto a dos estudiantes de doctorado, señalando el límite entre el Cretácico y el Paleógeno en la cueva de Geulhemmerberg (Países Bajos), donde se tomaron las muestras críticas que han proporcionado la primera medida del pH de las aguas oceánicas tras el impacto del asteroide / Laia Alegret
Químicos del CSIC han utilizado estructuras moleculares para matar células cancerosas, según el pH de su microambiente. El nuevo método, que se podría emplear en el futuro para el diseño de fármacos antitumorales, se ha probado con éxito en células de adenocarcinoma de pulmón.
Investigadores de la Universidad Autónoma de Madrid diseñan fertilizantes de micronutrientes “todo en uno” más eficaces y sostenibles con el medio ambiente. Utilizando dos nuevos agentes quelantes, o,p-EDDHA y EDDS, junto con hierro, manganeso, zinc y cobre, han conseguido mejorar las deficiencias de cultivos establecidos en medios con alto pH.
Un equipo de científicos del CSIC está evaluando las condiciones ambientales de la exposición temporal El último viaje de la fragata Mercedes en el Museo Naval de Madrid. Para ello, emplean una nueva herramienta, basada en pequeños sustratos de vidrio que cambian de color si el pH deja de ser neutro. El objetivo es proteger el cargamento de esta fragata que fue recuperado por España tras el litigio mantenido contra la empresa Odyssey.
Los científicos desconocían cómo la acidez creciente del océano afecta al mejillón de California (Mytilus californianus). Ahora, un equipo de científicos estadounidenses demuestra en The Journal of Experimental Biology que con la caída del pH del agua, las larvas de mejillón se debilitan y se vuelven más pequeñas.
Imagen al microscopio electrónico de 'Salmonella typhimurium' infectando células humanas.
Un grupo de investigadores de la Universidad de León ha analizado la respuesta adaptativa de dos serovariedades de salmonela en zumos de naranja y manzana para comprobar su capacidad de resistencia a estos ambientes.