Fatiga, dificultad para respirar, falta de memoria o dificultad para concentrarse, problemas para dormir o tos constante. La lista de los síntomas de esta enfermedad prolongada es extensa, si bien por ahora se conoce poco sobre su naturaleza. Un nuevo estudio ha revelado la activación inmunitaria en todo el cuerpo y la presencia de fragmentos virales en el intestino de las personas afectadas.
Se trata de un anticuerpo monoclonal con acción profiláctica y terapéutica, aislado a partir de muestras de sangre de un paciente infectado por este virus durante la primera ola de la pandemia. Antes de su desarrollo para uso en humanos, los expertos quieren llevar a cabo un ensayo clínico.
No existe en la actualidad ningún tratamiento eficaz para este tipo de síntomas prolongados en el tiempo, que pueden incluso llegar a ser crónicos. Esta investigación, liderada por el Hospital Universitario de Zúrich, pretende mejorar la atención de los pacientes con nuevas estrategias de tratamiento.
Un estudio publicado en Nature revela importantes alteraciones en la ecología y evolución de los virus H5 de la gripe aviar altamente patógena, incluido un cambio en su distribución mundial, que se ha extendido más allá de Asia.
¿En qué se parece el cambio climático actual y el de hace 56 millones de años, descubierto por Ellen Thomas y su colega James Zachos? Tal y como documentaron estos científicos, aquel episodio fue ocasionado por grandes emisiones de CO2 a la atmósfera. Otra similitud es que se trató de un calentamiento global que produjo largos periodos de sequía, seguidos de fuertes lluvias e inundaciones. “Lo mismo que ocurre y nos toca padecer ahora en todo el mundo”, dice Thomas.
Las limitaciones derivadas de la crisis sanitaria por la covid-19 alteraron las interacciones sociales tempranas de los bebés que vinieron al mundo durante este período. Este contexto ha generado ciertas dificultades posteriores en su desarrollo comunicativo.
Las políticas que restringieron el movimiento durante los primeros estadios de la pandemia por la covid-19 tuvieron un importante impacto en la conducta de los animales y sus desplazamientos. Así lo demuestra un estudio internacional liderado por la Universidad de Radboud (Países Bajos), cuyos resultados ofrecen nuevas perspectivas sobre la conservación de los ecosistemas y su relación con el ordenamiento social de la vida humana.
Un estudio de vigilancia genómica en Mozambique revela que la variante beta del coronavirus se transmitió a partir de migraciones regionales, y cuestiona el beneficio de cerrar fronteras. El trabajo compara con una nueva herramienta las muestras del país africano con secuencias del resto del mundo.
Un estudio científico español ha constatado que el incremento en las restricciones permitió reducir la transmisión del virus y la incidencia de la enfermedad. Los cálculos estadísticos apuntan a que aumentar un 34 % la intensidad de las medidas logró reducir la transmisión un 22 % semanal.
La Organización Mundial de la Salud advierte de que la covid-19 sigue siendo “una enfermedad infecciosa peligrosa” que puede causar daños considerables a la salud de las personas y a los sistemas de sanidad. Sin embargo, también reconoce que la pandemia ha entrado en una fase de “transición”, lo que puede dar paso a que el nivel de alarma toque a su fin en los próximos meses,