La colaboración científica ALPHA del Laboratorio Europeo de Física de Partículas (CERN) ha realizado las primeras mediciones en el antihidrógeno de ciertos efectos cuánticos, como el llamado efecto Lamb. Las medidas son consistentes con la teoría y las propiedades del hidrógeno ‘normal’, subrayando las simetrías entre la materia y la antimateria.
Los investigadores del experimento LHCb del Laboratorio Europeo de Física de Partículas (CERN) han observado por primera vez una diferencia entre materia y antimateria conocida como ‘violación CP’ en las desintegraciones de una partícula llamada mesón D0. El hallazgo, aunque resulte difícil de entender para el gran público, entrará a formar parte de los libros de texto sobre física de partículas.
Dos investigadores del Instituto de Física Corpuscular de Valencia han presentado un teorema para desenredar el engañoso efecto que produce la Tierra en las oscilaciones de neutrinos y antineutrinos y dificulta su distinción. El teorema se podrá aplicar en futuros experimentos como DUNE en EE UU y T2HK en Japón, además de aportar una nueva pista para explicar la asimetría entre la materia y antimateria en el universo.
Investigadores de la Universidad Autónoma en Madrid han demostrado teóricamente que se puede generar una reacción fotoquímica en cadena a partir de un sólo fotón, algo que hasta ahora no era posible. Se trata de un importante avance en la denominada química polaritónica, donde se une la química y la electrodinámica cuántica para activar reacciones ‘prohibidas’ para la química convencional.
En Lund, una ciudad de unos 90.000 habitantes ubicada en el sur de Suecia, se trabaja a todo ritmo en la construcción del que será uno de los proyectos científicos más ambiciosos del mundo. Se trata de la Fuente Europea de Neutrones por Espalación, una instalación de investigación científica con un gran acelerador lineal de partículas que permitirá desentrañar los misterios de la materia que nos rodea a escala atómica y molecular.
Quédense con este nombre: desintegración doble beta sin neutrinos. Físicos de todo el mundo tratan de descubrirla, y si la encuentran, además de llevarse el Premio Nobel, podrían explicar por qué en nuestro universo ha triunfado la materia frente a la antimateria. Ahora científicos del experimento GERDA acaban de actualizarlo para afinar la búsqueda de esta desintegración con una sensibilidad sin precedentes.
El experimento LHCb del Laboratorio Europeo de Física de Partículas (CERN) ha detectado evidencias de la diferencia entre materia y antimateria en bariones. Este tipo de partículas subatómicas, como los neutrones y protones, está constituido por tres quarks.
La materia oscura podría ser menos grumosa de lo que indicaban hasta ahora los datos del satélite Planck de la Agencia Espacial Europea, es decir, más uniforme de lo que se pensaba. Así lo reflejan los resultados del sondeo KiDS, donde se ha analizado a gran escala cómo la luz de unos quince millones de galaxias se ven afectadas por la influencia gravitacional de la materia.
Los científicos David Thouless, Duncan Haldane y Michael Kosterlitz han obtenido el Premio Nobel de Física de 2016 “por sus descubrimientos teóricos de las fases topológicas de la materia”. La topología es una rama de las matemáticas que permite describir cómo materiales muy finos pueden, paso a paso, experimentar extraños cambios gobernados por leyes cuánticas. Sus aplicaciones se extienden al campo de los superconductores y la electrónica.
La insignificante masa de los neutrinos, unas partículas subatómicas que podrían ser materia y antimateria a la vez, mantiene en vilo a científicos de todo el mundo. Ahora investigadores de la Universidad de Tokio, con la colaboración de un físico español, han utilizado uno de los ordenadores más potentes del mundo para analizar una desintegración especial del calcio-48, cuya vida de billones de años depende de la desconocida masa de los neutrinos. El avance facilitará la detección de esta rara desintegración en laboratorios subterráneos.