Investigadores del Laboratorio Kastler-Brossel de París (Francia) describen en el último número de Nature cómo obtener una medida cuántica casi ideal, que permite detectar el estado de un átomo con la mínima perturbación posible. El secreto es utilizar una pequeña cavidad óptica con dos espejos enfrentados.
El físico Richard Phillips Feynman
"Trampa" de iones utilizada en la investigación.
La ruptura de simetría tiene un papel muy importante en muchos fenómenos de la naturaleza. En mecánica cuántica y clásica, las simetrías implican leyes de conservación y la ruptura de una simetría significa que algún parámetro que caracteriza el sistema y que inicialmente está conservado deja de estarlo. Daniel Dagnino y Nuria Barberán, de la Universidad de Barceolna (UB), han analizado la ruptura de simetría en el proceso de nucleación de vórtices (en un sistema formado por átomos neutros que interaccionan de forma repulsiva y a cortas distancias) para describir, por primera vez, el estado superfluido en la transición, es decir, una superposición de estado con y sin vórtices.
Demostrar que el spin de un electrón es el responsable de que los puntos cuánticos no actúen como hasta ahora decía la física atómica es uno de los descubrimientos del estudio teórico realizado por Juan Ignacio Climente, del Departamento de Química Física y Analítica de la Universitat Jaume I de Castellón (UJI), junto a otros investigadores del Consejo Nacional de Investigación de Canadá, y que ha sido publicado en el último número de Physical Review Letters.
Investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y la Universidad de Cambridge han dado un nuevo paso hacia la demostración de la Hipótesis de Riemann, uno de los problemas matemáticos del milenio, relacionado con la distribución de los números primos. Los investigadores proponen un modelo de física cuántica en el que los ceros de la función zeta de Riemann se corresponden aproximadamente con los niveles de energía de un electrón sometido a determinados campos electromagnéticos. El modelo, aunque aún incompleto, podría ser la clave para la demostración de la hipótesis, premiada con un millón de dólares.