Investigadores españoles han definido hasta cuatro tipos de dolor de cabeza asociados al coronavirus y atribuidos, entre otros, a la tensión emocional o a la presión de mascarillas y pantallas de protección. Aunque la mayoría desaparecen, en algunos pacientes puede desarrollarse cefalea crónica.
Investigadores de distintos centros del CSIC están empleando la técnica de impresión 3D o fabricación aditiva para producir elementos de protección para los hospitales de Madrid. Ya se tiene listo un envío de 50 pantallas.