El proyecto CHAARM comenzó en enero de 2010 y durará hasta diciembre de 2014. Este consorcio de investigación financiado por la UE se basa en los resultados obtenidos por el ensayo CAPRISA 004, que demostró por primera vez cómo el uso de microbicidas puede prevenir la transmisión del VIH/SIDAy representan una vía de tratamiento futuro.