Un estudio de secuenciación genómica muestra errores aleatorios como origen primario de los tumores. El trabajo, publicado en la revista Science, repite los resultados de una polémica investigación, realizada por los mismos autores en 2015. Los expertos aseguran de nuevo que la mayoría de mutaciones del cáncer se debe a errores aleatorios en la replicación del ADN.
Concocíamos el genoma (el alfabeto del ADN) y la epigenética (sus signos de puntuación). Ahora, un estudio del del Instituto de Investigación Biomédica de Bellvitge habla del epitranscriptoma: la epigenética del ARN. El epitranscriptoma, señala el trabajo, podría verse alterado en algunas enfermedades como el cáncer.
La aparición de un linfoma folicular o de un linfoma difuso de células B grandes puede depender de un mismo gen. De acuerdo con un trabajo de científicos españoles y estadounidenses, el gen Crebbp está implicado en el origen de ambas enfermedades. Su pérdida o su mutación es clave para el desarrollo de una u otra patología, un descubrimiento que abre la puerta al desarrollo de nuevos fármacos.
Investigadores de Cataluña han desarrollado un abordaje innovador para dotar a un adenovirus de una alta especificidad contra las células tumorales. Esta nueva estrategia pretende conseguir que virus modificados genéticamente ataquen de forma selectiva a las células tumorales sin que las sanas se vean afectadas.
El primer modelo de predicción de riesgo basado en datos de la población española muestra que, en España, los hábitos de vida determinan más el riesgo de cáncer de colon y recto que la propia genética. Los resultados, basados en los datos de más de 10.000 participantes, se publican en Scientific Reports.
Un grupo de bioingenieros de la Universidad de California en San Diego ha desarrollado un test sanguíneo que detecta el cáncer y localiza el lugar donde está creciendo el tumor. El nuevo análisis permitiría un diagnóstico temprano y evitaría así el uso de técnicas invasivas que requieren cirugía.
Un total de 50 proyectos científicos serán financiados por la Fundación Ramón Areces con 5,3 millones de euros destinados al desarrollo científico, con especial atención a la investigación en enfermedades raras, a las que se dedica un tercio de la financiación, y al tratamiento del cáncer. La institución también ha destacado su interés por los trabajos relacionados con las energías renovables.
El cambio hacia la mamografía digital, en la que la película de rayos X es reemplazada por sistemas electrónicos más precisos, ha mejorado los índices de detección del cáncer de mama, pero también ha aumentado la tasa de sobrediagnóstico. Según indica un estudio llevado cabo en EE UU, esto puede conducir a que más mujeres sean sometidas a biopsias innecesarias para dolencias benignas.
Investigadores de la Universidad Rey Juan Carlos y la University College London han analizado la combinación de múltiples marcadores tumorales para la detección temprana del cáncer de ovario. El cáncer de ovario es la quinta causa de muerte entre las mujeres, con más de 140.000 fallecimientos al año en todo el mundo.
Este test identificará a los pacientes con baja probabilidad de tener tumores en el pulmón. / Nafi006