La Sociedad Española de Oncología Médica ha presentado hoy el informe ‘Las cifras del cáncer en España 2022’, que señala un ligero incremento en el número de nuevos casos con respecto al año pasado. Los datos aportados también revelan que los tumores fueron la segunda mayor causa de defunción en España en 2020, solo por detrás de las enfermedades circulatorias.
Científicos del CSIC han relacionado la presencia de una proteína con la detección temprana de tumores pancreáticos, la tercera causa de muerte por cáncer en países desarrollados. Este hallazgo supone un gran avance porque permitiría el diagnóstico a través de un análisis de sangre.
Debajo del mar, las células cancerosas pueden comportarse como parásitos en almejas, berberechos o mejillones, protagonistas del #Cienciaalobestia, e infectarlos de un tipo de cáncer transmisible parecido a la leucemia. Un nuevo estudio confirma que esta enfermedad puede propagarse incluso entre diferentes especies de almejas en el Mediterráneo y el Atlántico debido a las actividades humanas.
Una investigación llevada a cabo en más de 90.000 personas durante 28 años muestra cómo la ingesta de más de siete gramos de aceite de oliva al día se relaciona con menos riesgo de muertes por enfermedades cardiovasculares, cáncer y patologías neurodegenerativas y respiratorias.
La proteína CSDE1 coordina una compleja serie de mecanismos moleculares que impulsan la senescencia de las células, lo que a su vez suprime la formación de tumores. Así concluye un nuevo estudio, llevado a cabo por científicos españoles y realizado en ratones, que podría facilitar el desarrollo de nuevos tratamientos contra el cáncer de piel.
Un estudio liderado por el CNIO y el Massachussets General Hospital (EE UU) revela nuevas metodologías que permiten visualizar la reparación del ADN mediante el análisis de cientos de proteínas en un tiempo récord. Este trabajo podría facilitar el desarrollo de nuevas terapias contra el cáncer.
Un ensayo clínico en fase III muestra cómo añadir pembrolizumab al tratamiento convencional contra este tipo de tumor aumenta la tasa de respuesta objetiva de la enfermedad avanzada. Aunque es esperanzador, falta completar el estudio para comprobar si realmente mejora la supervivencia de los pacientes.
Investigadores estadounidenses desvelan que las células cancerosas segregan un tipo de colágeno que las mantiene en un estado latente. Cuando los niveles de esta proteína disminuyen, las células se reactivan y comienza el crecimiento metastásico. Este hallazgo podría ayudar al desarrollo de nuevas estrategias terapéuticas contra la reaparición del cáncer y su diseminación.
No existen en la naturaleza. Se fabrican en el laboratorio para darles el poder de llevar a los linfocitos hasta un tumor y provocar un amor fatal. Aún existen obstáculos en su desarrollo, pero hay todo un escaparate de promesas y ensayos en marcha. Estudios iniciales con ellos abren la puerta a un viejo sueño de la investigación: ver y atacar el motor interior de una célula tumoral.