Un equipo internacional de científicos, liderado desde la Universidad Autónoma de Madrid, ha logrado simular a nivel atómico la reacción fotoquímica más frecuente en el ADN: la formación de dímeros de timina, que se generan por los efectos de la radiación ultravioleta. Los resultados revelan cómo la propia estructura de doble hélice protege la integridad del código genético frente a esos dímeros, además de destacar el papel que desempeña el entorno biológico en la fotoestabilidad del ADN.
La Oficina de Patentes de Estados Unidos ha otorgado una serie de patentes sobre la técnica de edición del genoma CRISPR-Cas9 al Broad Institute. Este centro mixto del MIT y la Universidad de Harvard mantenía un litigio por la autoría con la Universidad de California desde hace más de un año. La tecnología tiene un potencial lucrativo de unos 45.000 millones de euros.
En unas montañas de Omán habita una subespecie de geco que hasta ahora no había dado signos de preocupación por su estado de conservación. Sin embargo, un equipo del Instituto de Biología Evolutiva en Barcelona ha descubierto, gracias al análisis de su ADN, que en realidad el pequeño reptil contiene 14 especies diferentes, lo que podría implicar que alguna de ellas esté en peligro de extinción.
Algunos microorganismos poseen un sistema desconocido hasta ahora para la detección y corrección de errores del material genético. El mecanismo previene que algunas bacterias, como Mycobacterium tuberculosis, desarrollen fácilmente resistencia a los antibióticos. El descubrimiento abre las puertas al desarrollo de nuevas estrategias para combatir la resistencia a antibióticos de algunas bacterias patógenas. Además, puede utilizarse para mejorar el rendimiento de procesos biotecnológicos de interés industrial.
Científicos y centros de investigación de España han contribuido a marcar grandes hitos en 2016. La primera detección de ondas gravitacionales de la historia, el hallazgo de un exoplaneta habitable la relación entre las grasas y las metástasis son algunos de los hallazgos con participación española. Esta es nuestra selección.
El primer puesto no deja lugar a dudas: el descubrimiento del año es la detección de ondas gravitacionales por el observatorio LIGO. En su ranking de 2016, la revista Science también incluye el hallazgo de Próxima b, un planeta del tamaño de la Tierra que orbita en la estrella más cercana al Sol, liderado por el astrónomo español Guillem Anglada-Escudé.
Científicos españoles han implementado un nuevo método para el diagnóstico de la glucogenosis, una enfermedad clínica y genéticamente muy heterogénea, cuyos síntomas y características son muy similares a los de otras enfermedades metabólicas. El hallazgo ha permitido la aplicación de terapias adecuadas.
No todo el mundo es capaz de reconocer el aroma fuerte y característico en el pis humano que se produce tras comer espárragos. Esta habilidad tiene un origen genético, según un estudio publicado en el número especial de Navidad de la revista BMJ.
Una serie de 41 artículos publicados por científicos del Consorcio Internacional del Epigenoma Humano arroja luz sobre mecanismos epigenéticos que facilitará nuevas formas de diagnosticar y tratar enfermedades. Entre la participación española, destacan trabajos sobre el tratamiento de los datos biológicos y sobre la metilación del ADN, que impulsa a las células a desarrollarse en diferentes identidades.
Por 150 euros puedes saber si tu ADN tiene mutaciones asociadas a enfermedades que podrían transmitirse a tus hijos. Pero, ¿qué ocurre con los análisis genéticos cuando mueres? Esa es la pregunta que se planteó la periodista Laura Chaparro en un reportaje por el que ha obtenido el Premio ASEBIO de Comunicación y Divulgación de la Biotecnología en la categoría prensa digital y nuevos medios.