Los submarinistas nadan en los fondos marinos del Mediterráneo la mayoría de las veces en busca de peces para observarlos; en otras ocasiones, lo hacen para pescarlos. Frente al peligro, estos animales han aprendido a diferenciar entre unos intrusos y otros, y su comportamiento se vuelve más evasivo ante la presencia de un buzo con arpón. Son protagonistas del #Cienciaalobestia.